Cuando Tell pasaba por la plaza con su hijo, le retaron a un duelo sabiendo que era un gran ballestero.
Le obligaron a ponerle una manzana a su hijo en la cabeza y lanzar una flecha a este que estaba a 100 pasos.
Si Tell acertaba se le quitarían los cargos , pero si no se le condenaría a muerte.
Un saludo,Aroa.
Hola maestra,creo que ya he ha reglado lo que me dijiste de la entrada, sino me dices lo que tengo mal y yo lo arreglo.
ResponderEliminarUn saludo,Aroa.
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